Estados Unidos ha dado un paso importante en sus esfuerzos diplomáticos para abordar el conflicto en curso entre Israel y Hamás al redactar un borrador para el Consejo de Seguridad de la ONU. La propuesta describe un marco para una fuerza internacional de estabilización en Gaza, prevista para operar durante al menos dos años. La medida es parte de la estrategia más amplia del presidente Trump destinada a poner fin a la violencia que ha continuado durante los últimos dos años.
Según funcionarios estadounidenses, que solicitaron el anonimato, el borrador está siendo actualmente objeto de una serie de discusiones y revisiones entre el consejo de 15 miembros y otras partes interesadas internacionales. Aunque el borrador aún no se ha compartido formalmente con otros miembros del Consejo de Seguridad, los funcionarios han indicado que servirá como documento fundamental destinado a generar consenso sobre un plan que daría legitimidad internacional a la fuerza de estabilización y alentaría la cooperación de tropas de diferentes países.
Hasta la fecha, países importantes como China y Rusia, que ocupan puestos permanentes en el Consejo de Seguridad, no han tenido la oportunidad de revisar nada del lenguaje propuesto. Se espera que su postura final sea crucial, ya que cualquiera de los países puede vetar la resolución si no es de su interés.
El borrador subraya la necesidad urgente de “un proceso de desmilitarización de la Franja de Gaza” y pide una “retirada permanente de armas de los grupos armados no estatales”. Un elemento clave del plan más amplio de Estados Unidos es abordar el desafío de desarmar a Hamas, lo que plantea obstáculos importantes porque el grupo aún no ha respaldado plenamente tales medidas.
Según el marco propuesto, la Fuerza de Estabilización operaría bajo un mandato amplio para garantizar la seguridad en Gaza hasta finales de 2027. El plan incluía la cooperación de una “Junta de Paz” destinada a supervisar temporalmente el territorio. El borrador también exige una cooperación más estrecha con Egipto e Israel.
Además, las fuerzas de estabilización tienen la tarea de proteger las zonas fronterizas junto con la fuerza policial palestina que han examinado y entrenado. La iniciativa también pretende coordinarse con diversas organizaciones internacionales para facilitar el flujo de ayuda humanitaria hacia Gaza. El borrador pide una “reanudación total” por parte de organizaciones como las Naciones Unidas, la Cruz Roja y la Media Luna Roja para garantizar que dicha ayuda no se desvíe y llegue a quienes la necesitan.
Los funcionarios británicos han destacado la necesidad de mantener el frágil alto el fuego y garantizar un flujo constante de ayuda, al tiempo que señalaron que quedan importantes interrogantes sobre los próximos pasos del plan de Trump. La implementación de la fase inicial de la estrategia aún está en progreso, y exige que cualquier fuerza estabilizadora cuente con el apoyo de un mandato claro del Consejo de Seguridad de la ONU.
A medida que se desarrollaron estas negociaciones, la atención se centró en la necesidad urgente de un enfoque integral para estabilizar Gaza y brindar asistencia humanitaria a sus residentes.












