La Universidad de Florida tiene el jugador más alto del baloncesto universitario: Olivier Rioux, de 7 pies 9 pulgadas. Sin embargo, a medida que se desarrollaba el primer partido de la temporada, Rioux se encontró al margen, lo que llevó a los fanáticos a preguntarse por qué no lo verían en la cancha.
Actualmente, Rioux no participa en juegos debido a su continua adaptación a las exigencias del baloncesto universitario de alto nivel. Los Gators eligieron vestirlo con camiseta roja en su primer año, lo que le permitió un tiempo crucial para desarrollar fuerza y habilidades. La temporada pasada estuvo presente para presenciar la victoria del equipo en el campeonato nacional, participando incluso en el ceremonial de corte de la red, aunque no pudo contribuir en el suelo.
Con la próxima temporada, las ideas de ESPN destacan el tiempo de juego limitado anticipado de Rioux. Después de su año con la camiseta roja, se espera que entre a la cancha, aunque la plantilla del equipo, repleta de titulares que regresan, podría limitar sus minutos. Una habilidad que mostró en la reciente Copa Mundial FIBA U19 en Suiza, los entrenadores señalaron usos potenciales para él en ciertos escenarios, como defender pases dentro del campo, donde efectivamente forzó una pérdida de balón.
Rioux ha llamado la atención no sólo por su extraordinaria altura sino también por los momentos virales que crea como parte del equipo. Su estatura le ha valido un lugar en el Guinness World Records y su presencia continúa atrayendo a los fanáticos, especialmente en momentos en los que tiene que permanecer de pie para tareas que requieren el uso de una escalera.
A medida que avance la temporada, los observadores estarán interesados en ver cómo y cuándo se integrará Rioux al plan de juego de los Gators. Mientras tanto, apoya pacientemente a su equipo desde el banquillo, con la esperanza de contribuir a su desarrollo.












