Waymo se está preparando para una ambiciosa expansión de su servicio de robotaxi y anunció que a partir del miércoles, sus vehículos autónomos se aventurarán en autopistas e interestatales en los principales mercados, incluidos San Francisco, Los Ángeles y Phoenix. Un avance notable para los viajeros del Área de la Bahía es que los pasajeros ahora pueden obtener automóviles sin conductor para recogerlos y dejarlos en la acera en el Aeropuerto Internacional San José Mineta. La compañía indicó que otras regiones pronto seguirán su ejemplo con servicios de autopistas similares.
La introducción de rutas de autopista es un proceso gradual, especialmente en Los Ángeles, donde los autos sin conductor de Waymo ya son una vista familiar en el centro y en varios vecindarios. En San Francisco, la expansión cubre toda la península al sur de la ciudad, incluidos centros tecnológicos como Palo Alto y Mountain View. Los pasajeros ahora pueden solicitar un sedán autónomo cerca del Ayuntamiento de San Francisco y viajar unas 45 millas por la US 101 para llegar al aeropuerto de San José. Además, Waymo está probando actualmente su servicio en el Aeropuerto Internacional de San Francisco en preparación para futuras operaciones en la acera.
La iniciativa robotaxi de Waymo debutó en Phoenix en 2020, sentando las bases para las aspiraciones actuales de la compañía de competir en California contra servicios de transporte establecidos como Uber y Lyft. La compañía también planea aumentar su presencia en Arizona ampliando sus servicios a las autopistas de la zona. De cara al futuro, los planes de expansión incluyen viajes por autopista en ciudades como Atlanta y Austin, Texas.
Desde sus inicios, Waymo ha sido reconocido como líder en la emergente industria de robotaxi, que ha tardado en madurar. La empresa enfrentó poca competencia directa hasta hace poco. Amazon ha anunciado planes para fabricar 10.000 robotaxis al año en unas instalaciones de Silicon Valley, con el objetivo de desafiar el dominio de Waymo en este campo. El esfuerzo llevó a Amazon a comprar la startup de conducción autónoma Zoox hace cinco años por 1.200 millones de dólares. Zoox causó sensación en septiembre al lanzar su propio servicio limitado de robotaxi en Las Vegas.
Mientras tanto, Tesla busca lanzar su propio servicio “CyberCab” para 2026, pero existen dudas en torno a este cronograma dado el historial de ambiciones incumplidas de la compañía en el espacio de los vehículos autónomos. General Motors se ha retirado del mercado de los robotaxi y, en cambio, ha reasignado recursos para desarrollar tecnologías avanzadas de asistencia al conductor.
A medida que la tecnología autónoma se expande, sus aplicaciones se expanden más allá del transporte. Por ejemplo, DoorDash ha lanzado su robot de reparto llamado Dot para transportar alimentos en diferentes ciudades. Capaz de alcanzar velocidades de hasta 20 millas por hora, el Dot está diseñado para usarse en calles, aceras y caminos de acceso, lo que demuestra la versatilidad de la entrega autónoma en paisajes suburbanos. La empresa ha experimentado con servicios de entrega con drones en diversas áreas.
Con el auge de los vehículos autónomos llega una ola de preocupaciones sobre la seguridad. Una nueva ley de California, que entrará en vigor el próximo año, hará que las empresas que operan vehículos sin conductor sean responsables de infracciones de tránsito. La ley ha dado lugar a incidentes, incluido un caso notable en San Bruno, donde un intento de multar a un automóvil autónomo por realizar un giro en U ilegal descubrió que sus formularios de citación no se adaptaban a dichos vehículos. Waymo ha asegurado a los reguladores que su tecnología de conducción autónoma será fuertemente monitoreada, lo que subraya su compromiso con la seguridad operativa.











