El huracán Melissa, clasificado como tormenta extremadamente peligrosa de categoría 3, tocó tierra a lo largo de la costa sur del este de Cuba cerca de Chivirico en la provincia de Santiago de Cuba en la mañana del 29 de octubre de 2025, con vientos sostenidos que alcanzaron los 193 km/h (120 mph). El evento sigue la trayectoria catastrófica del huracán a través de Jamaica el 28 de octubre de 2025, donde tocó tierra como un sistema de categoría 5 con vientos máximos sostenidos de 185 mph (295 kph), lo que lo convierte en el huracán más poderoso en la historia registrada de Jamaica. La tormenta ya se ha cobrado siete vidas en el Caribe, incluidas tres en Jamaica, tres en Haití y una en República Dominicana, y en esta última se reporta una desaparición.
En Jamaica, el huracán causó una devastación generalizada, lo que llevó al Primer Ministro Andrew Holness a declarar a todo el país zona de desastre para facilitar los esfuerzos de respuesta coordinados. Los informes indican inundaciones generalizadas, particularmente en la parroquia suroeste de St Elizabeth, el corazón agrícola, y la parroquia de Clarendon descrita como “bajo el agua” con inundaciones.
La infraestructura se vio gravemente afectada, incluidas líneas eléctricas y árboles caídos, lo que provocó cortes de energía que afectaron a 500.000 clientes, más de la mitad de la población de la isla. Cuatro hospitales resultaron dañados, uno se quedó sin electricidad y 75 pacientes tuvieron que ser evacuados. Las estructuras residenciales y comerciales perdieron sus techos y las carreteras se volvieron intransitables debido a los escombros y las inundaciones, lo que desplazó a muchos residentes.
El Primer Ministro Holness, en una declaración, anticipó la posible pérdida de vidas y enfatizó el compromiso del gobierno con la reconstrucción, diciendo: “Reconstruiremos y lo haremos mejor que antes”. Las operaciones de recuperación comenzaron el 29 de octubre, y los servicios de emergencia retiraron los escombros y evaluaron los daños, pero se esperaba que los aeropuertos reabrieran el 30 de octubre para acelerar los suministros de ayuda. Con alrededor de 25.000 turistas en la isla, el Ministerio de Turismo garantiza su seguridad en coordinación constante con el alojamiento.
Cuba, que ya lucha contra una grave crisis económica que incluye apagones crónicos, escasez de combustible y escasez de alimentos, enfrenta graves desafíos debido a la tormenta. Se emitieron advertencias de huracán para provincias como Granma, Santiago de Cuba, Guantánamo, Holguín y Las Tunas, lo que provocó una evacuación temprana de 750.000 personas a refugios.
Las clases se suspendieron en las zonas afectadas desde el 27 de octubre. Se espera que el huracán deje hasta 51 cm (20 pulgadas) de lluvia en el este de Cuba, provocando inundaciones y deslizamientos de tierra mortales. El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, en un discurso televisado, calificó a Melissa como “la más fuerte en golpear el territorio nacional” y prometió que “nadie se quedará atrás y no se escatimarán recursos para salvar la vida de la población”. Las evaluaciones iniciales de los daños en Cuba están pendientes, pero los funcionarios predicen un estrés significativo en la infraestructura.
Los pronósticos del Centro Nacional de Huracanes de EE. UU. indican que Melissa viajará sobre Cuba durante la mañana del 29 de octubre, antes de trasladarse al sureste y centro de las Bahamas ese mismo día, donde las advertencias de huracán permanecen activas y se insta a que los preparativos finalicen de inmediato. Se espera que la tormenta se debilite debido a la cizalladura vertical del viento, el agua más fría y las condiciones secas, pero se fortalecerá a medida que se acerque a las Bermudas más adelante en la semana, bajo alerta de huracán. Las bandas exteriores continúan trayendo fuertes lluvias sobre Haití y la República Dominicana, y se esperan de 5 a 10 pulgadas de inundaciones en el sureste de las Bahamas.
Al 29 de octubre de 2025, continúa el seguimiento del progreso del huracán y los esfuerzos de socorro, sin que se hayan reportado víctimas adicionales ni una intensificación importante más allá de las estimaciones iniciales. La coordinación de la ayuda internacional se intensificará en los próximos días para apoyar la recuperación en los países afectados.












