Las tensiones aumentaron rápidamente en el primer cuarto del enfrentamiento de la Semana 13 entre los New York Giants y los New England Patriots, centrándose particularmente en una jugada controvertida que involucró al mariscal de campo de los Giants, Jackson Dart. Mientras Dart intentaba luchar por un primer intento crucial cerca de la línea lateral, se encontró con una poderosa entrada del apoyador de los Patriots, Christian Ellis, lo que provocó una pelea en el campo.
El golpe llamó la atención de inmediato, lo que provocó un altercado cuando las bancas se vaciaron mientras los jugadores de ambos equipos se apresuraban a proteger a sus mariscales de campo. Los fanáticos en el estadio quedaron en shock cuando se produjo el caos y las emociones aumentaron en todos lados.
Sin embargo, después de revisar la jugada, los árbitros determinaron que el golpe de Ellis fue legal y no ameritaba penalización. Un jugador de los Giants finalmente recibió una sanción por conducta antideportiva luego del altercado, cuando Dhuili y los jugadores regresaron a la banca. El incidente dividió a los fanáticos, y muchos cuestionaron la imparcialidad de la decisión y si las acciones de Ellis deberían ser analizadas más a fondo.
Mientras continúa el debate entre los fanáticos y analistas sobre las implicaciones de tales golpes en el juego moderno, el incidente podría llevar a la liga a realizar una revisión del incidente en los próximos días.
A medida que se desarrolla la situación, ambos equipos están esencialmente interesados en dejar atrás la controversia y centrarse en el resto del juego, pero los observadores esperan ansiosamente cualquier otro anuncio de la liga sobre posibles medidas disciplinarias.












