Los demócratas en el Senado han expresado considerable consternación por el acuerdo de financiación recientemente propuesto, particularmente por sus implicaciones para la actual crisis de atención médica. El líder de la mayoría en el Senado, Chuck Schumer, ha expresado una fuerte oposición al proyecto de ley, diciendo que no aborda problemas de salud críticos que el partido ha tratado de solucionar durante mucho tiempo. Los comentarios de Schumer resonaron con frustración, ya que muchos en el Partido Demócrata abogan por reformas sustanciales para aliviar las preocupaciones sobre la atención médica.
El proyecto de ley generó críticas de varios demócratas de alto rango, particularmente aquellos que sintieron que la decisión de trabajar con los legisladores republicanos para evitar un cierre del gobierno fue equivocada. El gobernador de California, Gavin Newsom, no se contuvo y calificó el acuerdo de “patético”. Este sentimiento pone de relieve una creciente brecha dentro del partido sobre las estrategias para abordar cuestiones urgentes mientras se gestiona la financiación gubernamental.
Junto con disposiciones destinadas a evitar un cierre del gobierno, la medida incluye tres proyectos de ley de asignaciones destinados a financiar importantes agencias federales, incluidas Asuntos de Veteranos y Agricultura. El proyecto de ley también incluye una resolución continua que mantendría al gobierno trabajando hasta el 30 de enero, lo que genera preocupaciones sobre la posibilidad de otro cierre a principios del próximo año.
Sin embargo, un acuerdo reciente garantiza que todos los trabajadores federales recibirán su salario durante el cierre. Además, proporciona financiación fundamental para el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), que sirve como red de seguridad fundamental para casi uno de cada ocho estadounidenses, lo que garantiza que seguirá funcionando hasta septiembre del próximo año.
La próxima votación sobre el acuerdo marca el primer obstáculo de procedimiento en el proceso del acuerdo de financiación. Después de las deliberaciones del Senado, el proyecto de ley pasa a la Cámara de Representantes de Estados Unidos, donde se espera que enfrente sus propios desafíos. A medida que continúa el debate, los demócratas enfrentan divisiones internas que se reconcilian mientras intentan defender las reformas necesarias en la atención médica y otras áreas clave.












