A medida que se acerca el tan esperado partido inaugural de la temporada, el No. 6 Duke se enfrenta a Texas, ingresando al juego con un impresionante récord de exhibición de 2-0. La reciente victoria del equipo sobre el No. 18 Tennessee mostró el potencial de su destacado estudiante de primer año, Cameron Boozer. El joven alero ha deslumbrado tanto a aficionados como a analistas, promediando 28,5 puntos, 17,5 rebotes y cinco asistencias en sus dos primeras apariciones.
Se espera que Boozer, un recluta de cinco estrellas, continúe con este alto nivel de desempeño durante toda la temporada, según su ex entrenador de la escuela secundaria, Andrew Moran. Ahora entrenador asistente en la Universidad de Miami, Moran dice que la comprensión del juego de Boozer, combinada con su tenacidad en los tableros y su capacidad de anotar, lo distinguen. “Es muy bueno”, dijo Moran, enfatizando la consistencia y determinación de Boozer. A pesar de los desafíos que surgen con la transición al baloncesto universitario, Moran cree que Boozer estará a la altura de las circunstancias y afirmó: “En resumen, es simplemente un ganador”.
Moran reflexiona sobre los mejores momentos de la carrera de Boozer en la escuela secundaria, cada uno destacando su capacidad para desempeñarse y sobresalir bajo presión. Uno de los momentos más memorables llegó en 2022, cuando Boozer llevó a su equipo a su primer título de campeonato estatal. Contra un equipo muy favorecido por el Dr. Phillips, contribuyó con 17 puntos, siete rebotes y cinco asistencias en una estrecha victoria por 45-44. “No necesitábamos ganar ese partido”, recordó Moran, señalando la importancia de la actuación de Boozer en un momento tan crucial.
Boozer tuvo otra gran experiencia en un partido contra Wheeler High School en Georgia. Enfrentándose a jugadores de primer nivel como Isaiah Collier, Boozer mostró una destreza extraordinaria, disparando al 100 por ciento desde el campo en la segunda mitad para lograr una remontada. Morán comentó: “Era muy hábil y fuerte y siempre hacía las jugadas correctas”.
Los elogios de Boozer continuaron creciendo cuando ganó el Premio Gatorade al Jugador Nacional del Año, una hazaña que logró por segunda vez en 2025. Obtuvo el premio por primera vez en su segundo año, pero promedió 21,1 puntos y 11,3 rebotes por partido y solidificó aún más su dominio con 2 rebotes en su último año y 2 rebotes promedio. Moran enfatizó la rareza de tal logro, calificándolo de “surrealista” y un testimonio del talento de Boozer.
En un enfrentamiento de triple tiempo extra contra Gonzaga College High School en 2024, la capacidad de Boozer para desempeñarse bajo presión quedó demostrada una vez más. Acertó un triple crucial para forzar el tiempo extra y finalmente terminó el juego con 31 puntos en una victoria por 85-79. Moran recuerda vívidamente el juego y dice: “Él no perdió ese juego; simplemente no lo perdió”.
El liderazgo y la determinación de Boozer fueron evidentes cuando llevó a Columbus al título en los Chipotle Nationals de 2025. Después de una decepcionante derrota en las semifinales del año anterior, Boozer puso su mirada en la redención. Aunque sus estadísticas mostraron 11 puntos y ocho rebotes en el partido por el campeonato, Moran insistió en que la máxima prioridad de Boozer era la victoria del equipo. “Estaba concentrado en ganar, no le importaban las estadísticas”, señaló.
A medida que avanza la temporada, la comunidad del baloncesto esperará ansiosamente ver cómo Boozer traduce su increíble experiencia en la escuela secundaria para Duke, con la esperanza de ver más momentos que solidifiquen su estatus como una de las estrellas más brillantes del deporte.












