Un juez federal ordenó a los fiscales del caso penal contra el ex director del FBI James Comey que proporcionen material extenso de la investigación, lo que generó preocupaciones sobre el enfoque del Departamento de Justicia. El juez William Fitzpatrick expresó sus temores sobre la posible práctica de “acusar primero, investigar después”, destacando la necesidad de transparencia en el proceso legal.
En su orden, el juez Fitzpatrick ordenó que al final del día jueves, los fiscales deben presentar los materiales del gran jurado y otras pruebas reunidas durante el juicio. La decisión del juez se produjo después de que el equipo legal de Comey argumentara que estaban en una desventaja significativa al no poder revisar pruebas clave recopiladas hace años.
Comey, que permaneció en la sala del tribunal y no hizo comentarios ya que el caso surge de acciones tomadas en 2020, enfrenta cargos de mentir al Congreso. La acusación se produce pocos días después de que el expresidente Donald Trump instara públicamente a su fiscal general a investigar a Comey y otros oponentes políticos. Comey se declaró inocente y dijo que la acusación tenía motivaciones políticas y debería ser desestimada.
Los detalles discutidos durante la audiencia incluyen comunicaciones recuperadas de Daniel Richman, profesor de derecho en la Universidad de Columbia y colaborador cercano de Comey. Richman también trabajó para el FBI como empleado especial del gobierno. En opinión de la fiscalía, Comey acusó a Richman de alentarlo a hablar con periodistas sobre asuntos relacionados con el FBI, lo que llevó a afirmaciones de que mintió durante su testimonio ante el Congreso al negar que había autorizado a alguien en el FBI a actuar como fuente anónima.
La defensa de Comey respondió que sus comentarios sobre preguntas sobre el ex subdirector del FBI, Andrew McCabe, agregaron complejidad al caso en particular. Los abogados de Comey expresaron su preocupación ante el tribunal por la falta de acceso a los materiales obtenidos de Richman, diciendo que la información privilegiada no divulgada podría ser crítica para su defensa.
En su declaración final, el juez Fitzpatrick aseguró al equipo de la defensa: “Vamos a abordarlo, y lo haremos hoy”. El contexto que rodeó la acusación de Comey incluyó una publicación de Trump en las redes sociales que instaba a la fiscal general Pam Bondi a tomar medidas contra el exdirector del FBI y otras personas. La acusación fue dirigida por la ex asistente y abogada de Trump, Lindsey Halligan, quien reemplazó al fiscal de toda la vida bajo presión de la administración.
Al defender la acusación, el Departamento de Justicia argumentó en un expediente judicial reciente que las publicaciones del presidente en las redes sociales reflejaban una “intención procesal legítima”. La saga legal que se desarrolla pone de relieve las complejas divisiones del derecho, la política y el legado del liderazgo del gobierno anterior.












